viernes, 18 de julio de 2014

Los mitos que nos dieron traumas

Los mitos que nos dieron traumas
Juan Miguel Zunzunegui
2012
200 PP.

Este libro de Zunzunegui al igual que varios títulos de Francisco Martín Moreno (y hasta los de Rius) nos explica que la historia la escriben los ganadores; lo que nos enseñaron sobre la historia de México en las aulas no necesariamente es la verdad, solo es un conjunto de manipulaciones para darnos exactamente lo que el gobierno quiere que sepamos, nos venden héroes y villanos para darle un toque romántico a nuestro pasado, a lo largo del tiempo han conseguido consolidar una serie de mitos en los que el pueblo cree con vehemencia y lo peor del caso no es que se crean mitos y legendas fabulosas, eso pasa en todo el mundo, sino que como dice acá el compadre Zunzunegui los de México son mitos derrotistas que en mayor o menor medida tienen un efecto negativo sobre nosotros.

A manera de psicoanálisis el autor examina al paciente de nombre México y lo hace enfrentarse contra sí mismo, sus miedos y sus traumas durante 5 sesiones en las que aborda importantes puntos de la historia de México: El pasado prehispánico, la conquista, la independencia y la revolución y describe como estos hechos influyen el comportamiento de un complejo ser, el mexicano, lleno de contradicciones que, como el autor señala, es pobre pero honrado, humilde pero que presume de ser el consentido de la madre de Dios, aquel que venera a los indios muertos pero desprecia a los vivos, el que odia a los españoles pero habla su lengua y adoptó su religión, el que odia los gringos pero envidia su prosperidad y por eso cruza la frontera, aquel que carece de identidad porque unos se creen europeos y otros se creen indígenas olvidando que no son ni uno ni otro sino mestizos.

Nuestros mitos lejos de estimularnos a la superación hacen todo lo contrario, somos una pueblo que nació de la conquista o séase de la derrota, la virgencita nos ama porque somos pobres, todo tiempo pasado fue mejor, el petróleo es nuestro y constituye la soberanía nacional, todos extranjeros son malos y solo buscan como robarnos, en fin.

Según el diagnóstico del autor, padecemos de necrofilia, esquizofrenia, esquesofrenia además de ser unos nostálgicos que añoran el pasado. Duras palabras, como todos los diagnósticos, pero que invitan a la reflexión y mejor aún al cambio.